Si te matriculas en una escuela de surf en Cantabria pronto aprenderás a sostenerte sobre tu tabla y, poco a poco, sentirás la necesidad de ir probándote en diferentes experiencias de dificultad creciente. El surfista, desde luego, depende de su tabla; pero también del estado del mar.

La existencia de olas es fundamental: debes aprender a saber dónde encontrarlas y, sobre el terreno, a reconocerlas para poder disfrutarlas. Este tipo de enseñanzas las recibirás en un surfcamp en Cantabria de calidad.

Sin embargo, en este artículo queremos introducirte ya, básicamente, en este tema. ¿Vamos con ello?

Cursos de surf en Cantabria: tipos de olas

Libres u oscilatorias

Se identifican en la superficie de la mar y suelen depender de sus variaciones. No duran más de 30 segundos y muestran un pequeño giro.

De traslación

Son aquellas que surgen en las proximidades del litoral, cerca de la costa, y suelen formar gran cantidad de espuma.

Forzadas

Las produce el viento y, a veces, pueden convertirse en bastante altas. Muchos surfistas van a por ellas con su tabla cuando se generan, pero solo los más experimentados consiguen dominarlas. En realidad, no es una práctica aconsejable porque pueden llegar a ser peligrosas.

Sísmicas o tsunamis

Son la consecuencia de terremotos o explosiones volcánicas y se presentan en forma de una ola única con una gran velocidad y una altura superior a los 20 metros.

Tus monitores de cualquier buen surfcamp en Cantabria te informarán de que son, precisamente, las olas de oscilación las idóneas para disfrutar del surf. En primer lugar, son las más habituales, por lo que hay muchas más. Además, sus características las hacen idóneas para ir creciendo, progresivamente, en tus habilidades surferas.

En nuestra escuela de surf en Cantabria te formamos para que disfrutes del surf sin renunciar a la seguridad. ¡Apúntate a la diversión!